Los ingresos corrientes acumulados a junio 2021 sumaron B/. 2,758.5 millones, reflejando un superávit de 31.8% o B/. 664.8 millones, comparado con el monto presupuestado para este periodo, según el Informe Preliminar de Recaudación, de la Dirección General de Ingresos (DGI) del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF).
El director de la DGI, Publio De Gracia, expresó que las cifras demuestran que las actividades económicas presentan una mejoría, lo que indica que el consumo interno como externo va reactivándose.
La recaudación también estuvo 23.7% por encima de los B/. 2,229 millones registrados en el mismo periodo de 2020, detalla el informe.
Los ingresos tributarios acumulados representaron un 76% del total de los ingresos corrientes, totalizando B/. 2,109 millones, un 35.3% por encima de la cifra presupuestada.
Los impuestos directos reflejan un superávit de 63.7%, respecto a la cantidad presupuestada, al ascender a B/. 1,266.9 millones y los indirectos se incrementaron un 10.4%, en relación con el monto que se recaudó en igual periodo de 2020.
De Gracia explicó que la pandemia sanitaria producto de la Covid-19 dejó consecuencias significativas en los ingresos de la población y por ende del Estado. En vista de esto, el Gobierno emprende diversas acciones para la reactivación económica del país.
“No podemos dejar de señalar que las medidas del alivio tributario son una de las acciones que implementó el Gobierno Nacional, para la reactivación económica y colaborar con el proceso de reactivación de los contribuyentes, quienes pueden invertir este ahorro en sus actividades”, agregó el director de la DGI.
Detalló que el proceso de reactivación económica está divida en cinco áreas: la primera está constituida por el Plan de Vacunación, mediante el cual se han administrado 1.7 millones de dosis, de un total de 9 millones de vacunas autorizadas para compra.
El segundo componente incluye el apoyo a las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas, las cuales representan una fuente generadora de ingresos. Otra área del plan de reactivación incluye proyectos de infraestructura pública como generadores de mano de obra.
Además, se prevé la preservación de la capacidad del sector financiero y de otros sectores vulnerables de la economía y la estimulación de la atracción de inversiones extranjeras directas. “Todas estas medidas no serían posibles si no se contaran con los fondos necesarios para su ejecución”, manifestó De Gracia.